Y no, no me voy a rayar más. Para qué? Al fin y al cabo, todo empieza y todo acaba, si acaba es con razones al igual que si empieza, aunque en este caso, aun no sé las razones. ¿Me sirve de algo, rayarme, llorar, pensar en todos las cosas vividas, ponerme mal al pasar por todos los sitios que hemos estado? No. Nada es para siempre, nunca. Si algo he aprendido esque no me sirve de nada estar así. Sólo quiero eso, sonreír como antes, aunque esa sonrisa sea pintada con lápiz, cueste lo que cueste. Y ten presente una cosa, cuando te apetezca volver, vuelve, estaré esperando como una tonta.

2 comentarios: